Llevo siendo
profesor de Educación Secundaria en la especialidad de Educación Física desde septiembre
de 1998 y me considero un trabajador privilegiado por poder haber hecho de mi
afición, el deporte, mi profesión.
Intento ayudar
a mis alumnos a que disfruten de la actividad física como he llegado yo a
disfrutar de la realización de cualquier deporte y de cualquier actividad física
a lo largo de mi vida, intentando conseguir que cuando terminen su etapa tanto en
la E.S.O. como en el Bachillerato hayan adquirido ese hábito deportivo que les
ayude a tener un compromiso personal hacia su salud, su bienestar físico y
mental gracias a la realización de cualquier práctica de actividad física.
Me parece muy
triste que los responsables políticos utilicen mensajes populistas para
conseguir que la opinión pública no perciba el interés real de algunas de las
medidas que se están tomando en contra de la Educación de nuestro país.
Ningún profesor
entiende que trabajar 20 horas lectivas sea un problema para los docentes si
eso redunda en la calidad de la Educación o en la productividad del
profesorado, pero en el IES Clara Campoamor de La Solana, se ha pasado de 51
profesores en el curso académico 2010-11 a 46 profesores en el actual curso
académico 2011-12. Observen que si a nivel político se quisiera hacer una apuesta
por la calidad de la Educación, nos habrían aumentado las horas lectivas a 20
horas, 22 horas ó 25 horas (medida que apoyo), pero hubieran reducido el número
de alumnos por clase, hubieran aumentado el número de grupos por nivel y por
tanto, habrían mantenido las plantillas de los Centros educativos y hubieran
asegurado una mejor calidad en la docencia, es decir, nos habían hecho trabajar
más, si es eso lo que pretenden y a la vez hubieran conseguido que hubiesen más
grupos de desdobles, agrupamientos flexibles o cualquier otra medida en los
Centros educativos que mejorasen el tratamiento a aquellos alumnos que tienen
mayores problemas de aprendizaje o un mejor tratamiento a aquellos grupos con
mayor rendimiento académico.
Preguntémonos: ¿Por qué se lanza a la opinión pública,
la campaña de las 20 horas lectivas?, muy sencillo, porque de esta manera
parece que los profesores somos unos “vagos”, que no queremos trabajar y que
por 2 horas más lectivas a la semana nos vamos a movilizar.
Nunca
discutiría si trabajamos mucho o poco, cada trabajo tiene sus peculiaridades,
el nuestro tiene unas horas presenciales con alumnos, donde impartimos clase,
explicamos, proponemos actividades, corregimos tareas, supervisamos el trabajo de
los alumnos, evaluamos su progresión, tomamos notas sobre su trabajo diario,
etc. y esas son las “famosas” 20 horas lectivas
semanales…pero hay un número de horas que son difícilmente computables: horas de preparación de clases, elaboración
de este blog por ejemplo, corrección de
actividades y trabajos, corrección
de exámenes….y otras actividades que debemos hacer los profesores ajenas a
la docencia, por ejemplo, si eres tutor,
entrevistas con los padres, envío de notas (que debemos hacer labores de
administrativos, metiendo en sobres los boletines de notas y poniendo sellos, por ejemplo), reuniones para
coordinador el plan de acción tutorial de ese nivel, mediador entre los alumnos de tu tutoría, etc.; si eres jefe de departamento, debes coordinar las programaciones
y la consecución de objetivos para cada nivel con los miembros de tu departamento, realización de PTI (trabajos
para alumnos) al terminar cada evaluación, elaboración de programaciones a comienzos de curso, completar las memorias y las actas del departamento, etc.; además debemos hacer guardias de
centro, de recreo y de biblioteca; otras veces organizamos actividades extraescolares para los alumnos, otros coordinan programas europeos (Comenius, por ejemplo), etc.…podría detallar
todo lo que conlleva la labor docente, pero creo que no es cuestión de
justificar nuestro trabajo, es sólo reflejar que hacemos lo que se requiere en
nuestro trabajo y nada más. No sé si llegamos a las 35 horas semanales, a las
37, 5 ó a las 40 semanales, supongo que dependerá de cada cual, unos seguro que
las sobrepasarán con creces y otros no llegarán, pero la realidad es que todos
cumplimos con el horario que se nos marca a comienzo de cada curso académico y
después, cada profesor decide cómo quiere impartir docencia y que materiales,
actividades y demás quiere utilizar para formar a sus alumnos.
Pero
personalmente me duele que se nos desprestigie de esta manera: “Los
profesores sólo trabajan 20 horas a la semana y además tienen muchas vacaciones”,
y evidentemente que me siento un privilegiado por el trabajo que tengo, pero lo
que tengo muy claro es que quiero lo mejor para los alumnos a los que imparto
clase, que gracias a la Educación puedan formarse como personas y en todo lo
que esté en mis manos, poder ayudarles a conseguir lo que ellos quieran en sus
vidas, pero sólo les pido una cosa a los políticos, que nos ayuden a los
docentes a prestigiar nuestra profesión, y lanzando campañas como la que han lanzado
por las 20 horas lectivas, nos hacen a todos los docentes un flaco favor y
sobre todo, no ayudan a que la sociedad prospere gracias a una Educación de
calidad.